Ser profesor no debe
ser fácil, puesto que hay multitud de factores que inciden en esta profesión,
como por ejemplo la multiculturalidad en una misma aula. ¿Cómo se debería
enfocar pues, la Historia si hay alumnos musulmanes y católicos? ¿Cómo se
explica que, en las imágenes católicas donde se presenta a Mahoma en el
infierno no son más que publicidad contra el islam? Las imágenes no son
inocentes, pues consiguen lo que buscan: calar hondo en el pensamiento de la
sociedad. Podría poner cualquier otro ejemplo, pero a éste le encuentro
especial atractivo, ya que, tras ver la película de La profesora de Historia, me ha gustado la manera tan firme y
segura con la que ha contestado, llegando incluso a calmar a los alumnos
musulmanes enfadados porque para ellos representar a su Dios en el infierno es
una ofensa.
El método educativo de
Gueguen (la profesora) es brutal, además de significativo. Ella confía en todos
y cada uno de sus alumnos, sin discriminar. Es persuasiva, a la vez que
paciente, pues son dos valores que, en la enseñanza, son muy importantes. De
esta manera se consigue una participación activa del alumnado, independiente de
sus capacidades; se consigue la colectividad en las aulas, pues se integran y
se relacionan entre ellos, con el objetivo de que cada uno de los alumnos
consiga construir su propia opinión de las cosas. Su sistema de enseñanza resulta interesante
porque es innovador, ya que se sale de la enseñanza tradicional de dictados y
libros. Va mucho más allá de lo que se puede dar por entendido dentro de un
aula, les hace ser partícipes de la Historia, les motiva a investigar, a ser
creativos, a pensar y opinar. Esto es lo que debería ser la enseñanza en
general, todos deberían hacer de sus clases una interacción grupal entre alumno
y profesor.
Por tanto, como se
menciona al principio, ser profesor no debe ser fácil, ya que cada alumno
requiere de una atención diferente; se deben usar medios educativos afines a ellos y no dejar a nadie atrás. En varias ocasiones, en clase se ha hablado sobre el
atractivo que causa temas como el nazismo en los alumnos adolescentes. Llama la
atención que, en la película, el tema que usa la profesora para atrapar a sus
alumnos es indagar sobre los testimonios de los niños y adolescentes en los
campos de concentración. De esta manera se despierta
la inquietud de querer saber más, e incluso se llega a la frustración, pues
resulta chocante saber que niños con la misma edad que muchos de ellos hayan sufrido
tales acontecimientos. Merece la pena ver la película, así como otros documentos que reflejan la rebeldía en las aulas o el fracaso educativo, pero ésta en especial, motiva e ilusiona.